Hace tiempo no escribía aquí, quizás es porque me cerré un poco a reflexionar las cosas y me obligué a concentrarme mas en hacer que en pensar. Pero creo que es necesario comentarse a si mismo los pensamientos, a veces sirve hasta para madurar.
Vengo a escribir sobre los nuevos. Los que llegaron este año. En la U les decimos "novatos", y hace tiempo que no ingresaban tantos! si el año pasado entraron 26 y ahora eran casi 50, fue bastante raro ver toda esa masa de chicos de aprox. 18 años entrando a sus primeras clases.
Ya llevamos 2 meses de clases, que se han pasado volando, y me he dado cuenta de que los nuevos son especiales. No todos, pero varios de ellos me llaman mucho la atención por una razón que no parece ser tan evidente en generaciones anteriores: realmente aman estar en Química. Y si digo realmente es porque se nota mucho. No solo son chicos que vienen a entretenerse y después a quejarse porque les esta yendo mal en las pruebas. Son capaces de conversar entre ellos lo genial que es la carrera hasta ahora... y no han visto nada! llevan dos meses de clases generales (calculo, física y muy poca química) y van al laboratorio solo una vez a la semana (no saben que después pasaran los 5 días de la semana metidos ahí), pero eso basta para entusiasmarlos. Las bajas notas no los desaniman, y siguen creyendo que lo mejor esta por venir.
He conversado bastante con ellos, y siempre me hacen saber que están muy entusiasmados con todo esto. A los grandes nos preguntan en que laboratorio estamos trabajando, que hacemos, cuales son las investigaciones de los profesores, etc. Y con cada cosa que le decimos, cada foto que les mostramos, se ponen ansiosos por llegar a las instancias en que estamos nosotros.
Me alegra verlos así, y tengo fe en que serán una excelente generación, no solo como estudiantes, sino que como personas. Los obstáculos que vienen son grandes, y eliminaron el entusiasmo de muchos de mis compañeros, que ya no están en este camino por esa y otras razones. Espero que la voluntad de los nuevos sea grande y que ningún obstáculo o caída derrumbe esa motivación que tanto han demostrado.
Agradezco al destino por haberme dado la oportunidad de tomar las riendas de una organización cuya tarea es aumentar esa motivación, porque los chicos nos han respondido super bien. Ojalá eso no termine, para ver los frutos del esfuerzo de todos.
